Nelson Castro: "La bonanza económica oculta la baja calidad institucional"

El prestigioso periodista capitalino reconoció los logros económicos del kirchnerismo, pero alertó sobre la desigualdad social que no se corrige. Afirmó que uno de los problemas del país es la ausencia de una oposición fuerte. Su punto de vista sobre Binner, Rossi y Bielsa.

Invitado por la Sociedad Rural de Venado Tuerto, el periodista Nelson Castro ofreció el viernes último en la sala “José Pedroni” del Centro Cultural una conferencia sobre “Realidad política y social de la Argentina”. En la ocasión, fue precedido por una charla sobre “Biocombustibles”, a cargo del Ing. Martín Fraguío, en el marco de las Jornadas de Capacitación y Agronegocios 2007.
Previo a su exposición, Castro ofreció una conferencia de prensa en un hotel céntrico, donde advirtió sobre las tendencias autoritarias y hegemónicas del Gobierno nacional, señalando que para incurrir en esas prácticas reñidas con las virtudes democráticas y republicanas, “el kirchnerismo aprovecha la bonanza económica que, a la luz de la crisis de 2001, tiene un valor enorme. No hay dudas de que los índices económicos de la actualidad son muy positivos, pero hay que decir que son producto de la devaluación y la implementación del plan de Roberto Lavagna”, subrayó, agregando que “Kirchner es un hombre que maneja muy bien los números y demuestra éxitos importantes, como la solución de la deuda externa. Sin embargo, está claro que se aferra a estos logros para gobernar, cooptar y ejercer su autoritarismo”, aseveró el conductor de El Juego Limpio en TN.
Para el visitante, la bonanza económica está garantizada por una relación peso-dólar que asegura estabilidad y productividad, aunque lamentó que el Gobierno no profundice en políticas que propicien una redistribución de la riqueza. “Con estos números de la economía, es inexplicable que la desigualdad social sea tan grande”, objetó.
Sobre el oscuro papel de la oposición, Castro observó que “hay opositores, pero la oposición como tal, no existe, no tiene entidad; que la oposición no tenga la fuerza suficiente para erigirse como alternativa de poder es parte del problema que tiene la Argentina”.
Agudo en su análisis, el disertante recordó que “en sus inicios, el Gobierno atendía reclamos sociales, como el de la reforma de las instituciones, entre ellas el mejoramiento de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Hoy, un Kirchner más poderoso, descubre que la mayoría de la sociedad, satisfecha por la recuperación económica, se desentiende de la urgencia de perfeccionar la calidad institucional. Así es como todas estas cuestiones pasan a un segundo plano, salvo aquellas donde el Gobierno decide ejercer un alto perfil, con una sobreactuación permanente, como en el tema de los derechos humanos”.

Dudosas encuestas. Castro no dudó de los altos índice de popularidad del Gobierno nacional y, en particular del Presidente, acotando que de la lectura de dichos números se desprenderá el postulante oficialista, pues en principio la candidatura de Cristina Kirchner no aseguraría un triunfo en primera vuelta. “Cuando el Gobierno quiere tener encuestas auténticas las logra, pero ésas no son las que se publican”, definió.

Discriminación. “Salvo en cuestiones muy específicas, como una licitación, un concurso o el recordatorio del vencimiento de impuestos, no debería existir la publicidad oficial”, señaló el periodista, como declaración de principios. De todos modos, requerido sobre la actuación del Gobierno en ese sentido, indicó que “la publicidad oficial tiene que distribuirse entre todos los medios, en función de su llegada a la gente. Con este concepto debería manejarse, no como ahora, que se constituye en una forma de presión y cooptación de los medios”.

¿Nunca se equivoca? “Es falso eso de que el pueblo nunca se equivoca. La condición de mayoría, que es un elemento cuantitativo, no asegura tener la razón, que es un elemento cualitativo. Las mayorías se han equivocado en el mundo… los alemanes votaron a Hitler. Sin dudas que el sistema que debe regir es el democrático, pero tiene esta falibilidad”, sentenció.

Optimismo. “En mis viajes por el interior del país observo un germen de participación social muy fuerte, que se expresa por fuera de las estructuras políticas. Es indispensable este involucramiento de la gente para generar mecanismos de control y de acción. Soy optimista con respecto a la evolución de la sociedad argentina”, completó.

Incógnitas santafesinas
“Saber que si (Carlos) Reutemann fuera el candidato a gobernador, ganaría, me parece que es un tema digno de análisis. Habría que preguntarse qué ha pasado con la sociedad santafesina después de la gestión de Reutemann, que para mí es un bluff, y más aún con las inundaciones (del río Salado, el 29 abril de 2003). Es increíble que, con esos antecedentes, tenga aún ese nivel de adhesión”, planteó Castro, en su descarnada descripción del Lole.
En cuanto a los actuales precandidatos del PJ, opinó que Rafael Bielsa y Agustín Rossi carecen de un perfil de liderazgo, en tanto que del postulante socialista Hermes Binner dijo que acredita el antecedente de una exitosa gestión en la ciudad de Rosario, aunque registró entre las flaquezas la limitada estructura del socialismo. “Las tres variantes generan incógnitas. La vida política de Bielsa no está ligada ni a Santa Fe ni al peronismo. Tampoco Rossi cuenta con una base militante propia. En el caso de Binner, creo que si gana, no será un elemento de choque contra el Gobierno nacional. De hecho, si Kirchner no interviene en esta provincia es porque sabe que puede perder. Lo de Rovira en Misiones le dolió mucho y ahora está muy cuidadoso”, precisó.

(Publicado el lunes 2 de abril en diario El Informe de Venado Tuerto)