La candidatura de Freyre y su influencia en la interna del PJ

Uno de los mayores misterios de la política venadense de los últimos meses se despejó la semana pasada con el anuncio del retiro de Roberto Scott, tras una docena de años -se cumplirán en diciembre- en el ejercicio del poder municipal, cediéndole la precandidatura oficialista a intendente al supersecretario José Freyre. No hay que esperar ninguna encuesta de último momento, como en la Casa Rosada tendría que hacer Néstor con Cristina -¿le temen a una segunda vuelta?-; en Venado, después de muchas vueltas, Scott ya eligió a su yerno, aunque todavía falta para que la bendición se oficialice ante la ciudadanía.
Al tiempo que rechaza una y otra candidatura y grita a los cuatro vientos que “es el turno de los más jóvenes”, el veterano Scott aumenta sus influencias dentro del justicialismo, como lo demostró hace una semana en la “Cumbre del Cumelén”, en el rol de anfitrión de un importante cónclave sectorial que reunió al precandidato obeidista Rafael Bielsa y casi todos los intendentes peronistas de la provincia. Con Freyre apuntalado para pugnar por la sucesión, Scott cerró el círculo territorial con las bancas de senador y diputado provincial, que Obeid y Bielsa habían dejado en sus manos. Como en 2003, las distancias entre el intendente Scott y Ricardo Spinozzi volvieron a esfumarse. Aunque también se tomará unos días para la confirmación, el Tino es el virtual precandidato a senador -irá por la reelección- en el esquema pergeñado por Obeid, quien no tiene ni un sí ni un no con el ex piloto de Fórmula Uno, ya que ni siquiera se hablan.
Hasta el mes pasado, el reutemismo se había mostrado como un bloque homogéneo, y hasta presumía de ser el “fiel de la balanza” en la interna entre Bielsa y Rossi, pero las necesidades pudieron más, y cada uno de los dirigentes definió su proyección política en función de las particularidades territoriales. Así como Federico Reutemann (sobrino del Lole) encabeza la lista de candidatos a diputados provinciales del precandidato a gobernador Agustín Rossi, Spinozzi será el candidato a senador por el bielsismo en el tercer departamento más populoso de la provincia y, para completar la diáspora, la senadora nacional Roxana Latorre, otra reutemista a ultranza, sacudió el tablero lanzándose como candidata a gobernadora por fuera del Frente para la Victoria, al mismo tiempo que trascendía el desistimiento de Omar Perotti a la precandidatura a gobernador para concentrar los esfuerzos en retener la intendencia de Rafaela.
Mientras el rufinense Gustavo Dehesa tratará de retener la diputación provincial sostenido por la también obeidista Liga de Intendentes (¿conseguirá un lugar expectante?), Scott tiene unos pocos días más para definir un candidato a diputado que ocupará uno de los primeros espacios de la lista. Hace cuatro años, concedió ese privilegio a otro de sus discípulos, Jorge Lagna, quien aún no pierde las esperanzas de ser, otra vez, el apuntado por la varita mágica del intendente venadense.

¿Qué cambia con Poroto?
La confirmación de la precandidatura de Freyre significó un mazazo en la nuca para algunos dirigentes del tercer sector del PJ (ni scottistas ni lucifuercistas), esperanzados en captar el núcleo nada despreciable de referentes descontentos con los desplantes de Scott, si es que éste decidía postularse para un cuarto mandato, como muchos suponían. En cambio, con la candidatura de Freyre, devenido en la esperanza blanca del scottismo, de inmediato se generaron expectativas de transformación en el cuestionado estilo de gobierno del oficialismo, aun cuando a lo largo de su trayectoria en la función pública, como coordinador del Plan General, director de Acción Social, concejal (apenas seis meses) y supersecretario, Freyre nunca demostró rebeldías ante su suegro y padrino político. Sin embargo, hay peronistas confiados en que Poroto, una vez apoltronado en el Sillón de Aufranc y con la lapicera en la mano, colocará su propia gente en el gabinete (también en el Concejo), desactivará las típicas confrontaciones scottistas y restablecerá la institucionalidad que su suegro insiste en ignorar, como lo hizo esta semana en su tercera ausencia consecutiva a la apertura del período ordinario anual de sesiones legislativas.
Con el tercer sector prácticamente neutralizado, sólo la agrupación “17 de Octubre” que lidera el lucifuercista Jorge Viano podría ejercer resistencias ante el scottismo. Aunque en sus dominios hace algunas semanas que no hay noticias, se cree que las recientes novedades surgidas de San Martín y Marconi precipitarían decisiones en los próximos días. Distantes de las estrategias del Comando Departamental “Rossi Gobernador”, capitaneado por Oscar Barotto, Antonio Prats y Martín Labbé, los vianistas evalúan presentar lista por fuera del Frente para la Victoria, aprovechando la estructura del Frente Venadense, aun cuando esa jugada los alejaría de la puja por el diputado provincial. No obstante, los defensores de esa operación sostienen que el lucifuercismo se beneficiaría electoralmente ofreciéndose como una tercera alternativa ante el scottismo y la oposición que encarnaría Roberto Meier o Lisandro Enrico, según quien sea el triunfador en las primarias.

(Publicado el viernes 9 de marzo de 2007 en diario El Informe de Venado Tuerto)