Después de 15 años de recorrer los mismos espacios políticos con Spinozzi, ahora el ex intendente Scott acató la orden de Kirchner de alinearse con Agustín Rossi, el candidato de la Casa Rosada y rival del senador venadense en las próximas internas. Scott cree que Freyre debe hacer lo mismo para evitar que la ciudad se quede sin obra pública. “Kichner es muy duro y no perdona”, alertó. Sin embargo, admitió que Rossi no puede ni pisar la provincia por su defensa de las retenciones móviles.
El próximo 13 de julio se realizarán las internas justicialistas santafesinas con -hasta ahora- dos postulantes a la presidencia: el jefe del bloque de diputados nacionales oficialista, Agustín Rossi, y el jefe del bloque de senadores provinciales del mismo sector, Ricardo Spinozzi, aun cuando desde distintos ámbitos partidarios insisten en la probable aparición de un candidato de la unidad.
Aunque el reutemista admitió que “uno está dándole pelea al caballo del comisario (Agustín Rossi), a un dirigente santafesino con gran proyección en los medios nacionales”, también acotó filosamente que “es muy difícil desarrollar una campaña cuando uno tiene dificultades para llegar a determinados lugares”, en referencia a las duras posiciones de Rossi en defensa de las retenciones móviles, que generaron disgustos entre legisladores, intendentes y jefes comunales del PJ, como así también entre los afiliados peronistas de los pueblos afectados por la controvertida resolución kirchnerista. Más aún, en una reciente gira por departamentos del norte, Spinozzi anticipó que la lista que lidera se bautizó “Federalismo por Santa Fe”, con el evidente objetivo de distinguirse más aún de un Rossi que, según definió el Tino, “practica un estilo más ligado con las decisiones que se toman en Buenos Aires”.
Hasta el viernes último, ni el siempre influyente Roberto Scott, ni su sucesor José Freyre, se habían pronunciado sobre esta interna, pero esa noche, en el envío televisivo En la Tecla (Canal 12), el ex intendente entregó declaraciones que sorprendieron a propios y extraños. Lejos de embanderarse con la candidatura de Spinozzi, con quien cultiva una relación política desde hace 15 años, Scott sentenció que “el presidente del partido (Néstor Kirchner) ha elegido a Agustín Rossi y lamentablemente no hay mucho que pensar. Los santafesinos saben quién es Spinozzi, pero si la orden del presidente es que el candidato debe ser Rossi, el desgaste de esta interna sería terrible”, señaló el caudillo peronista, sugiriendo que el Tino debería declinar su postulación.
Más adelante, aunque aclaró que no hablaba en nombre de Freyre, alertó que sería “un error” que el intendente se pronuncie en apoyo de Spinozzi. “Todos sabemos que cualquier Gobierno central te niega la obra pública o cualquier otro beneficio cuando uno se le pone en contra. Hasta la misma gente terminaría diciendo que Venado fue castigada (por el Gobierno) porque su intendente jugó con Spinozzi. Y eso le pasó al presidente comunal chabasense (Osvaldo Salomón), que firmó una solicitada a favor del campo con mucho coraje, pero ahora será imposible que la autovía (Rufino-Rosario) vaya a pasar por Chabás”.
“Me gustaría que esta interna pueda evitarse, porque a Spinozzi lo conozco desde chico y me costaría mucho votarle en contra, pero también digo que si Freyre juega con Spinozzi, que se olvide de tener obras públicas para la ciudad”, machacó Scott.
“Freyre va a optar por Rossi”, subrayó en el panel televisivo, corrigiendo de inmediato el desliz: “Que él (Freyre) haga lo que quiera… si el intendente fuera yo, optaría por Rossi. En estas condiciones, insisto que preferiría no ir a votar, pero debo reconocer que si me pronuncio por Spinozzi, le corto a la ciudad la relación con el Gobierno nacional”. Enseguida, como si aludiera al Presidente en funciones, Scott advirtió que “Kirchner tiene un carácter muy duro y no perdona”, aun cuando en ese punto incurrió en una contradicción, pues tanto Freyre como él mismo, no están alineados con las retenciones móviles del Gobierno -aunque tampoco hayan cerrado filas con el campo-, y esa actitud también podría precipitar represalias del Gobierno.
Luego, el ex intendente admitió, en sintonía con Spinozzi, que el Chivo Rossi no está en condiciones de desembarcar en muchos lugares de la provincia por los repudios de origen chacarero, afirmándose en su deseo de evitar las internas mediante una figura de consenso.
Consultado sobre el porqué de la marcada parcialidad de la Casa Rosada, Scott consideró que hasta antes de desatarse el conflicto del campo, los Kirchner aceptaban una interna libre de intromisiones en Santa Fe, pero sostuvo que el alineamiento de Rossi con el Gobierno y las simpatías de Spinozzi y el mismísmo senador nacional Carlos Reutemann con las posiciones del campo, definieron, al mismo tiempo, la bendición presidencial al primero y la crucifixión de los dos últimos.
Luego, Scott reconoció que en las elecciones primarias provinciales del año pasado, su sector se enroló en la línea del ex canciller Rafael Bielsa, en contra de Rossi, que en esa instancia tenía como representantes locales a los sectores de Julio Eggimann y Oscar Barotto y, por otro lado, a los peronistas disidentes de Jorge Viano. “Me costaría mucho trabajar para Rossi, que ya perdió varias elecciones, pero el Presidente fue tajante y no nos deja chances”, afirmó.
Sobre la virtual ruptura política con el spinozzismo, que con esta decisión scottista pierde a uno sus respaldos más cercanos, el ex intendente dijo que el Tino es inteligente y “sabrá comprender” esta situación política, aun cuando admitió que el actual senador provincial podría erigirse en un rival de fuste en 2011 para las pretensiones reeleccionistas de Freyre como intendente.
Ni con el campo, ni con el Gobierno
El conflicto entre el Gobierno y el campo mereció un análisis de Roberto Scott, que además de contar con la experiencia de 12 años en la Intendencia local, supo desempeñarse como productor agropecuario y acopiador, sin olvidar que su abuelo Juan Scott fue uno de los pioneros de la Sociedad Rural de nuestra ciudad. “El Gobierno se equivocó adoptando una medida polémica que desencadenó estas rispideces y las entidades agropecuarias se equivocaron con protestas extremas de las que no pueden volver, como los cortes de rutas. Si Cristina aflojaba, la gobernabilidad se hubiera debilitado, pues cada sector que se considerara afectado por una decisión oficial se creería con derechos para cortar rutas. Hace pocos meses se votó por este Gobierno para que ejerza el poder político, aunque este empecinamiento en no corregir nada le está generando un enorme costo político”, razonó Scott, equidistante.
“La solución es retrotraer las retenciones al 11 de marzo, volviendo al 35 por ciento, y suscribir un compromiso con los productores de no vender ni un solo grano de cereal en negro. Así, el Gobierno recaudaría mucho más y la gente cumplidora del campo podría recobrar la tranquilidad, en tanto que los transgresores tendrían que caer presos por estafar al Estado. No quisiera equivocarme, pero estimo que hoy el 40 por ciento del cereal se vende en negro, y si estas medidas del Gobierno se mantienen, será peor aún. Nadie dice nada de esto, ni el Gobierno, ni el campo, ni el periodismo, pero alguien tiene que decirlo, aunque lo que diga yo no vaya a llegar muy lejos”, remató el ex intendente.
Conocedor de la problemática desde su etapa empresarial en Cereal Sur, Scott recordó que la evasión no era tan sencilla con los controles de la Junta Nacional de Granos, y minutos después recordó que en los ’90, el presidente Carlos Menem le ofreció un cargo en el Gobierno: “Yo le dije que lo único que aceptaría es la dirección en la Junta Nacional de Granos, aunque sea por unos pocos meses. No sólo que no me convocó, sino que al poco tiempo disolvió la Junta, porque afectaba muchos intereses, sobre todo de los grupos exportadores. Hoy mismo, el Gobierno es muy duro con los productores, pero no lo es tanto con los exportadores. Hay que reconocer que el campo, en las épocas buenas y en las épocas malas, siempre invirtió en el país, en su pueblo, en su campo, incorporando tecnología, cambiando la camioneta, fertilizando y hasta pintando los postes. Sólo algunos grandes productores sacaron la plata del país”, resumió, añadiendo que “a partir del próximo lunes (por hoy) las dos partes tienen que dejar de lado las confrontaciones y apurar las gestiones para salir del conflicto, porque los argentinos estamos perdiendo muchas oportunidades. En el resto del mundo se ríen de nosotros por todo esto”.
(Publicado el lunes 26 de mayo de 2008 en diario El Informe)
1 comentario:
El papá interfiriendo en la política del nene.
Me parece haber visto esta película.
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