Ante tantas críticas que sufrió José Freyre por no generar una lista de precandidatos a concejal liderada por una figura sobresaliente, capaz de atraer votantes por su propio peso específico, más allá de encabezar la lista del intendente, sería oportuno echar a volar la imaginación y conjeturar, sólo por un momento, qué habríamos dicho los venadenses si el propio Freyre se postulaba en el primer puesto de la nómina oficialista para promover el “efecto arrastre”, escoltado de Germán Mastri, Liliana Rostom y Raúl Debonis. Imaginemos, además, un discurso porotista convocando a plebiscitar su gestión -como lo hace ahora con la postulación de los principales secretarios de su gabinete- y garantizar la gobernabilidad mediante un Concejo con mayoría propia de cinco ediles, y porqué no media docena; mejor aún, para justificar su candidatura testimonial. Qué diríamos si José Freyre, con su tono reflexivo, tratara de convencernos de que no está engañando a nadie, porque anticipa que renunciará a la banca para continuar ocupando el Sillón de Aufranc hasta fines de 2011. Otro argumento podría haber sido que en el sistema electoral santafesino de internas abiertas, obligatorias y simultáneas, el oficialismo necesita sí o sí a Poroto en la lista de concejales para evitar que el vianismo coloque un candidato -como ya ocurrió en 2005- en un puesto expectante, y que luego militaría en la oposición. Incluso, para perfeccionar la maniobra, podríamos suponer que Freyre le pidió a Roberto Scott -aún con buena imagen en la ciudad- que lo secundara en la lista, aunque de todos modos renunciarían ambos, cediendo las concejalías a los secretarios municipales que poblarían los últimos escalones de la lista del oficialismo.
Freyre y Scott, sin dudas, se harían acreedores de los peores calificativos por haber impulsado ese ardid, el mismo que en la limítrofe provincia de Buenos Aires, escenario de la “madre de las batallas” el 28 de junio, protagonizarían el ex presidente Néstor Kirchner y el gobernador Daniel Scioli, con la solidaria imitación de una docena de influyentes intendentes del conurbano, dispuestos a liderar las listas de concejales en sus distritos, para luego renunciar, claro está, en el marco de estas novedosas candidaturas testimoniales, que más convendría denominar falsas o apócrifas.
Ya era grave y condenable que los funcionarios y legisladores (de todos los sectores partidarios) abandonaran sus mandatos por la mitad para postularse a cargos de mayor jerarquía, pero supera todos los límites esta artimaña de postular a un gobernador o un intendente para un cargo legislativo, bajo la advertencia de la inmediata dimisión -antes de asumir- para permanecer en sus responsabilidades ejecutivas. ¿Alcanza con reconocer el pecado antes de cometerlo para quedar libre de culpas? Y además, ¿qué garantías existen de que todos los electores estén enterados de esa advertencia? ¿Y si fueran centenares, miles, decenas de miles, los ciudadanos que votan por esa lista creyendo que se trata de candidaturas auténticas? Luego, si es anticonstitucional ejercer dos cargos públicos al mismo tiempo, ¿no lo es también postularse para ello?
De este desenfreno por conservar el poder sin que importen los medios se desprende un explícito reconocimiento de que los liderazgos circunstanciales -siempre tan flexibles, lábiles y mutantes- apabullan a los proyectos o los modelos políticos, toda vez que resulta indispensable acudir al candidato del momento para ganar una elección, o para no perder tan feo. Asimismo, esta fiebre de las candidaturas testimoniales ratifica la vigencia de la dictadura de la chequera, que obliga a los dependientes de los caprichos de la Casa Rosada (sean gobernadores o intendentes) a exponerse ellos mismos en las próximas elecciones, ante la desconfianza presidencial de que jueguen a dos puntas junto con su tropa, como tantas veces lo hicieron con su instinto de supervivencia algunos caciques del PJ bonaerense, en su mayoría ex menemistas, ex duhaldistas y futuros ex kirchneristas.
Otra de las contraindicaciones es el debilitamiento -más aún- de la división de poderes, desde que se imponen funcionarios ejecutivos al frente de las listas legislativas, los que con sus posteriores salidas potenciarán los efectos nocivos de las listas sábana. En esta acumulación de deterioros para la calidad institucional que ocasionan estas maniobras distractivas, se inscribe el sesgo autoritario que no admite ninguna objeción, como lo testifica el caso del mediático recaudador bonaerense Santiago Montoya, despedido por Scioli por rechazar la candidatura a concejal de San Isidro.
También opera en ese sentido el concepto imperante de gobernabilidad, que se asocia malamente con mayoría o, más bien, con hegemonía. Por el contrario, las sociedades más gobernables son las que exhiben cierto equilibrio político, plasmado en la composición parlamentaria, y facilitan la alternancia democrática. Tan a menudo suelen darse esos intercambios en el ejercicio del poder, que ningún opositor se atrevería a perjudicar la gestión del oficialismo de turno, sabiendo que pronto podría hacerse cargo de esa misma administración.
Por otro lado, más allá de que los mayores culpables son los referentes políticos que impulsan las falsas candidaturas, la sociedad -con fuerte dosis de autocrítica- debería preguntarse cómo puede ser que baste con tan burda maniobra -aprovechando los vacíos legales- para volcar el resultado de una elección. ¿Cuántas falencias anidan en la oposición para que el oficialismo -supuestamente- se beneficie tanto con un mascarón de proa que oculta postulantes menos tentadores? Y luego, ¿cómo se entiende que cierta parte de la sociedad premie con el voto un comportamiento falto de ética que debería ser castigado con todo el rigor? Todo es una palmaria demostración de la ausencia de “condena social” ante estos excesos, y como el gobierno kirchnerista incumplió su promesa de impulsar la reforma política -que evitaría todos estos dislates-, solamente podría ocurrir que, en virtud de una impugnación, la oportuna intervención judicial resguarde a los argentinos de la proliferación de los falsos candidatos, otro golpe más para seguir vaciando la democracia, burlando la República y degradando la Constitución, en nombre de la continuidad del “modelo”.
(Publicado el miércoles 22 de abril de 2009 en diario El Informe)
18 comentarios:
Eso que señalás ya lo hizo Freyre, salió de ejecutivo para presentarse a concejal y luego retomó su puesto de la municipalidad. Solo que él no era el intendente.
Si, es cierto, pensé en incluirlo ese detalle en el artículo, pero -nobleza obliga- no creo que en esa ocasión se haya urdido un "plan perverso", sabiendo que Poroto a los seis meses volvía al Ejecutivo para ocupar la estratégica Jefatura de Gabinete. Estimo que, sobre la marcha, tanto Scott como Freyre, se dieron cuenta de que habían cometido un error político. Dado cómo Scott trataba al Concejo y sus habitantes, y sabiendo que se venía el "operativo reemplazo", convenía que José se desempeñara en el Ejecutivo y se mostrara como un "hombre de acción", virtud que en la banca perdería día tras día, aun cuando en esos seis meses no abandonó del todo las funciones de Acción Social. Acá, la obscenidad, es la alevosa premeditación de la maniobra...
Después de la alevosa maniobra premeditada del vicepresidente de la nación,todo es posible.
Debo responder al "anónimo" que más allá de la inédita situación de un vicepresidente de la Nación que está armando un proyecto político opositor -eso es innegable-, en nada se justifica la actitud de quien, por ocupar las más altas investiduras, debe sujetarse a la legalidad y a la ética política más que ningún otro. Por otra parte, tampoco creo que sea cierto que Cobos asumió la vicepresidencia con este proyecto político, sino que el mismo se precipitó a partir del "voto no positivo". Además, percibo que muchos de los que cargan todas las culpas en el vice, en realidad quieren esconder las responsabilidades kirchneristas en el fracaso de la Concertación y de la Transversalidad, para dar lugar a estas alianzas escasamente "progres" de Néstor y Cristina con el menemista Scioli, los duhaldistas "barones del conurbano" y el moyanista líder cegetista.
Gracias por escribir...
Concuerdo con usted,con que Cobos,precipitó con el voto N+ su propio proyecto.Ahora,cómo usted exige a las más altas autoridades,ética política le recuerdo qué el ingeniero Cobos es el Vice,segundo en el escalafón.Gracias por dejar participar en su espacio y me parece un buen lugar para debatir,para sumar distintas opiniones.Saludos
Hay cuestiones que no resisten comparación.
Las candidaturas testimoniales son eso.
Testimonio de las apretadas a los candidatos.
Testimonio del temor fundado a perder en varios frentes.
El temor a la fortaleza de la sociedad.
Testimonio de la incapacidad para aunar voluntades.
Lo de Cobos es todo lo contrario. Es un voto emitido sin ningún tipo de vicio de la voluntad, es un voto del Vice Presidente de los argentinos, no del escudero del mandamás. Es testimonio, pero testimonio de otra cosa...
Y respecto a lo local, creo que la lista oficialista está desde el vamos en situacíón de desventaja, porque está jugando al borde de la Constitución Provincial. Muy al borde. Y eso puede generarle a la Ciudad problemas institucionales de mayor envergadura que los piletones del ingreso de Avenida Santa Fe, lás dársenas portuarias de Avenida Chapuis, o los quebradizos hormigones de las nuevas calles asfaltada, que vienen con lomos de burro incorporados (serruchos que le dicen, solo faltan las vías del ferrocarril...)
Me estoy yendo del tema, y del Blog.
Mis respetos, muy buenas las columnas.
Es interesante qué participe en el intercambio,un candidato a concejal,desde ya le agradezco.Ahora yo puedo interpretar,qué si yo votara el proyecto político del ingeniero Meier y usted fuera presidente del consejo,(claro qué estoy hablando de un caso hipotético)puedo suponer qué usted no tendría ningún problema en votarle algo en contra y pasarse a la oposición y empezar una campaña a favor suyo.
Reitero mi agradecimiento y Manuel
si es tan republicano,no borre los comentarios de su blog,qué no le dejé ningún insulto,sólo le dije qué si usted tiene el pensamiento del diputado Iglesias,le va a hacer perder al ingeniero Meier algunos votos peronistas.Saludos.
Hay cuestiones que no resisten comparación.
Perdón, creo que repetí el inicio.
Uno es libre de suponer lo que desee. Uno debe ser lo suficientemente amplio para entender que no siempre lo uno supone es lo que sucuede (Casi un Manual de Historia Argentina)
Respecto a los blog cruzados, en el personal jamás se me hubiera ocurrido borrarlo, porque sería censurar su espacio de opinión, ni por asomo lo tomé como un insulto, me parece una opinión valorable y respetable, más allá de que aquí vuelva a sostener el mismo criterio que allá: Prefiero el voto afirmativo al negativo. Son gustos. Pero si me dan a elegir entre el voto de un peronista con nombre y apellido y el de un ciudadano anónimo, usted ya percibe por cuál me inclino.
De todos modos no le insto a dar la cara, si es su sincera posición.
Pasa que en este país se hicieron muchas cosas desde las sombras y el anonimato, y cada uno es dueño de poner las cosas en el lugar que crea conveniente.
Debemos coincidir. De lo contrario, asumo un voto menos.
No hay ningún problema Manuel,mi nombre con qué firmo en los blog es gustavo,el mensaje que le dejé en el suyo ayer, hoy a la mañana,no estaba, ahora sí, tal vez por eso la confusión.Le agradezco el respeto,y vuelvo a repetir qué me parece qué este espacio,si el señor Juan Franco lo permite,es un buen lugar para debatir.Un saludo.
gustavo
Correcto, Gustavo.
Si el Juan no lo considera inconveniente. De todos modos colijo que ni usted ni yo le rehuímos al debate en el medio que sea, y eso es positivo.
Desconozco el motivo de esa ausencia. Tal vez hubo que hacer un refresco de pantalla. A veces sucede que los cambios no se ven en el primer ingreso.
Respecto al voto peronista, perdone mi testarudez, pero voy a tratar de obtener el suyo, en el corto o en largo plazo, y será a traves de la discusión de ideas, nomás.
Creo que el movimiento peronista es tan amplio que abarca al pueblo argentino en su conjunto, con todas las bondades y maldades que ello trae aparejado.
La doctrina justicialista es tan abarcativa, que en ella se pueden sentir cobijados sin remordimientos los paladines de la justicia social, y a su vez lo más rancio de la derecha reaccionaria.
Otros espacios políticos al no ser tan abarcativos, se encuentran con menos consecuencias de esa índole.
Es innegable, que más allá de quién le dé contenido a la estructura justicialista, es un partido con vocación de poder y liderazgo como ninguno, me atrevo a decir, en latinoamérica.
Pero, también me atrevo a decir, que de los últimos 25 años de democracia, 17 años fueron de gobiernos justicialistas, y lo invito a sacar sus conclusiones.
De todos modos, el arraigo popular del peronismo es incuestionable, y erraría quien lo negase. Y tiene un componente mitológico, sé decir, haciendo analogía con el Racing de Avellaneda del 66, recuerda? No sé su edad, perdón. Pero si así fuera, aquella escuadra siguió teniendo hinchas generación tras generación sin ganar nuncas más por mucho tiempo nada. Hago el parangón con el General Perón, en el sentido de que luego de muerto siguieron surgiendo peronistas por todos lados. Es un proceso sociológico digno de investigación y análisis.
Le agradezco la oportunidad que me da de realizar este intercambio de opiniones, porque por un lado su pensamiento me enriquece, y por el otro estoy en mi salsa. Todo por el mismo precio.
Y por si fuera poco, agradezco al señor Juan, cuyo pensamiento agudo y crítico admiro, por la oportunidad que otorga en su espacio virtual para este tipo de encuentros, en especial el que estamos llevando a cabo.
Llevese mis respetos, y nunca deje de sostener sus ideas.
Manuel,el respeto es mutuo y esperemos qué se agreguen más contertulios.Con respecto al peronismo le voy contar una anécdota venadotuertense,en las últimas elecciones a intendente,un compañero de lo qué hoy sería su espacio (Frente Progresista),(aclaro que digo compañero, no en el sentido peronista del término),ante la derrota,se expresa de esta manera:'y los negros no saben votar',mientras siga estando ese pensamiento,mientras se siga pregonando de alguna manera el voto calificado,compañero Manuel,tendrá qué hacer un esfuerzo,le diría titánico para conseguir el voto P.Un Saludo.
gustavo
Que se sumen, compañero Gustavo. Está bueno.
Respecto a ese comentario venadotuertino, no es de asombrarse. Si es de lamentarse, y contra eso hay que remar. Venado Tuerto es una Ciudad muy conservadora, y por esa se dan los gobiernos que tenemos. Es, básicamente, y creo haberlo publicado alguna vez, un almacén de estancias, y como tal se maneja.
Hoy, creo que hay dos grandes grupos económicos que se la están disputando, algunos con más "luces" que otros, pero con el mismo fin. Lucrar merced al Estado Municipal. Hoy ese es el desafío. Fortalecer el Municipio para detener ese avance corporativo.
Y en esos estamos los que estamos.
El voto calificado es denigrante, y ahí recuerdo algunos párrafos del legislador Iglesias, con el cuál no me identifico, pero si me hago eco de sus reflexiones de las oportunidades que tenemos para mejorar.
Volviendo al tema del conservadurismo, que genera esas expresiones nefastas a las que hace mensión, hoy está encarnado en el Gobierno Municipal que tenemos, que esconde detrás del caribuenismo la ineficacia para enfrentar a los grupos arriba mencionados, por inoperante o por decisión política, pero claramente encuadrado en el modelo conservador resptuoso del statu quo.
Creo que Venado debe crecer, tanto en lo cultural y democrático para que esas expresiones odiosas que mencionó sean mínima expresión, como en la faz institucional y económica.
Vea un ejemplo, con casi los mismos puntos de partida, ciudades como Rafaela, en Santa Fe, y Villa María en Córdoba, han tenido otro decurso en su historia, y si las conoce verá que su industria se ha desarrollado, su gente cuenta con ámbitos educativos en todos los niveles, y su gente quiere vivir en su Ciudad.
Esa es la meta. Articular todos los sectores para encauzar la energía en pos de la Venado que crezca.
Hay mucho por hacer.
Pero le adelanto mi concepto: Creo que es el Concejo Deliberante el lugar desde donde se deben crear y recrear esos lineamientos. Es el órgano de representación política por excelencia, y es quien debe generar la visión de la Ciudad que queremos.
Una satisfacción este intercambio.
Le agradezco.
Veamos,no coincido de qué esos grupos qué usted menciona,sean realmente los dos poderes en pugna,si lo entiendo desde el poder político,pero eso es lo mismo que suponer que a nivel nacional los K. tienen el poder real.
Coincido qué Venado Tuerto es una ciudad conservadora,y sin abrir juicio de valor,(lo dejaré para otro momento),le doy humildemente mi opinión de cómo funcionan las cosas.
Creo qué Venado,realmente tiene un PROYECTO,y es fundamentalmente con un pérfil en el desarrollo casi exclusivo en lo ecónomico,digo casi porque de vez en cuando deja grietas y aparecen movimientos qué lo cuestionan,(la biblio,el galpón,el cej),esos movimientos hacen qué el PROYECTO se dé un respiro y permite qué los hijos de la ciudad hagan danza,teatro,patín,pintura,etc,etc.
Si hay algo en lo simbólico qué lo expone(al PROYECTO),es la puerta de entrada al shoping con su corona en la altura.
Ahora bien,¿cómo hacemos para qué la ciudad dé un salto de calidad?,desconozco cómo funcionan las ciudades qué usted nombra,pero me permito un ejercicio,desde el lugar de un simple opinante...(depués sigo, tengo qué cumplir mi rol de padre).Saludos.
gustavo
Esperaré, Gustavo el devenir de sus reflexiones, cuando disponga, conincidiendo en muchas de sus apreciaciones. Cuando hablo del almacén de estancias, grafico ese concepto de proyecto de desarrollo basado exclusivamente en lo económico. Una ciudad fenicia. Más respecto a la generación de espacios principalmente para el desarrollo de la juventud border, si se me permite llamar así a nuestra juventud no masificada en el consumo, sino singularizada desde la creatividad, he visto a lo largo de mi vida gran cantidad de intelectualidades dilectas, que en su momento generaron en mi respeto y proximidad de pensamiento, y hoy son mercaderes de uno u otro de los grupos que he presentado como los disputantes del poder real de nuestra comunidad.
Desde su necesidad de supervivencia, legitiman con argumentos sofistas el accionar de unos u otros. No es deplorable ni mucho menos, es su modo de vida. Entonces esos espacios que hoy parecen semilleros de libertad, es como que nunca llegan a florecer.
Como le decía al comienzo, quedo a la espera, agradable espera.
Y cumpla su rol paterno con tranquilidad.
Hola me llamo víctor he visto tu blog es genial y muy original por eso te invito al mio es miscosaspreferidasdevictor.blogspot.com.No es gran cosa pero te divertirás.si quieres deja un comentario porque me gusta leerlos.
Llego tarde a esta elevada discusión en casa de un amigo, me gustaría aclarar algunas cosas.
Con respecto al vicepresidente me suena que es como aquella infiel que se casa en segundas nupcias con un joven rico, al que a poco de andar también le desmuestra su infidelidad. Podrá esgrimir mil excusas pero la infidelidad tanto como los cuernos son para toda la vida.
Respecto al caracter fenicio de nuestra ciudad que señalan, permitanme discrepar con Uds., este modelo conservador que impusó la lógica mendemista, de la mano del hoy precandidato a la senaduría nacional por el kirchnerismo el otrora Intendente Scott, no ha sido una constante en nuestra ciudad. Me arriesgaría a decir todo lo contrario.
Necesitaría que Manuel se explicitara un poco más, ya que aspira a ser concejal de nuestra querida ciudad, sobre cuales son esos "dos grandes grupos económicos que se la están disputando".
Creo que si bien el modelo neoconservador recala en el sillón de Aufranc de la mano de Scott, este desarticula con la habilidad de un prestidijitador toda posibilidad de que esto suceda. No ocurre lo mismo con su yerno, que insiste en poner representantes del empresariado en ámbitos de la política. Nadie le negará a éste último su capacidad de relacionarse con los mas humildes, gestionar sus necesidades, articular todo lo concerniente a lo social, pero en el resto de su gestión vemos solo recncillas internas entre su sector y el del Spinzzi-Lagna, estos úlnimos nacidos y criados bajo el manto reutemista que mucho tiene que ver con el otro peronismo.
Por lo que Ud. Manuel si aspira a una banca en el concejo, debería aclarar muy bién a quién está dispuesto a combatir desde esa excelsa tribuna y a Ud., estimado Gustavo a secas, debería pedirle que nos aclare, a los ciudadanos y votantes de a pie, qué peronismo nos gobierna, cual es destino al que este Piloto de tormentas nos lleva y si es verdad que naves piratas imperiales aspiran abordar su nave.
Juan, te pido disculpas por expresarme en tu blog, un poco de calor no le viene nada mal, ya no escribo casi sobre política en el mío, lo hago en Artepolítica que es un blog colectivo nacional, por eso me quedan ganas a veces de intercambiar ideas sobre lo local y hoy he encontrado el clima preciso para hacerlo.
Gracias
Estimado Charly Boyle,no me corra con lo del simple ciudadano de a pie por qué no se lo cree ni usted,sí es para entrar al intercambio,con la pierna un poco levantada,no hay problema, y sí no me equivoco usted también es pre-candidato a consejal,así que estaría en las mismas condiciones de Manuel y el simple ciudadano sería yo,qué no aspira ningún cargo.
Con lo de Cobos puede qué tenga razón,así que tengan cuidado con la fórmula Binner-Cobos o viceversa.
La nave imperialsta es la cuarta flota,qué merodea los mares cercanos,je.
Saludos y una alegría qué se sume.
gustavo.
Pucha, caramba, el simple ciudadano soy yo también, qué embromar...
Vamos por partes dijo Jack.
No me inmiscuyo en la conciencia de Cobos. Trato de interpretar nomás, pero todo tiene una vuelta, Charly. Carrió, Kirchner, Menem, De Matía y Julio Eggiman.
Si no aceptamos el cambio de voluntad de las personas, caemos en la rígidez de los partidos de extrema izquierda, que a la larga no hacen nada, o en la de los poderes armados, que a la larga ya sabemos.
Respecto al carácter fenicio, creo que es anterior a la era mendemista.
De acuerdo a mi análisis es el producto de lo que quedo de una promesa de Venado industrializado que decapitó el gobierno militar.
Un Venado donde cada obrero de Construcciones Metalurgicas tenía un torno en su casa, un Venado respuestro, un Venado que tal vez debió ser lo que hoy son Rafaela o Villa María por citar casos cercanos. Pero entre la política económica impuesta y la tipología de nuestra sociedad y dirigencia somos lo que supimos conseguir.
Podemos cambiar.
Respecto a los grupos económicos que menciono, mi querido Charly, le diré que operan desde organizaciones que no tienen nada que ver con su origen. Cooperativas y Mutuales. Irele desgranando, porque esto me gusta, este debate enriquecedor.
No aspiro a combatir esos poderes, querdido Charles. Es otra la intención.
Es fortalecer al Gobierno Municipal, sobre el que coincido en tus apreciaciones. Es hacer pesar el interés común por sobre los negocios particulares, que después pagamos todos.
Pagamos el juicio por el Palacio Municipal, pagamos la fibra óptica, pagamos y pagamos.
No es culpa del chancho, Charly. Es que no hay un Estado que pueda imponer su decisión. Hay un Estado prebendario, solicito y tonto.
Eso es lo que creo.
Esos poderes no deben ser combatidos, más aún deben ser integrados, porque per ser demuestran la pujanza y capacidad de trabajo que tienen, la habilidad para haberse posicionado política y económicamente de la manera que lo hicieron.
Esos grupos, deben, además de todo eso, no lucrar en desmedro de los SIMPLES CIUDADANOS, sino por el bienestar de ellos, que es tal el destino con el que fueron creados, en esa época en que no éramos una ciudad fenicia.
Respetado Charly, esa es mi visión de las cosas.
Así que sin más, me da por despedirme, no sin antes apelar a lograr el voto de Gustavo, que francamente me resulta muy necesario, y me adelanto antes de que se lo pidas vos y quede relegado.
Un abrazo y el agradecimeinto de siempre al periodista y amigo Juan, que debe estar pergeñando su próxima columna sin saber que se le metieron a hacer bulla por la puerta de atrás.
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