El escenario político venadense se conmovió ayer con la salida de José Freyre del esquema de Rafael Bielsa para abrochar abruptamente con Agustín Rossi, un referente acrítico del Gobierno nacional, con el cual Poroto mantiene una buena relación institucional, pero que a la hora de encolumnarse detrás de una candidatura provincial, no vaciló en relegarlo para acordar con el ex canciller. Aun cuando ayer habíamos alertado que “no habría que descartar la opción de un arreglo con Rossi”, dado el fuerte enojo del intendente José Freyre con el paquete cerrado de candidaturas que el bielsismo venía abrochando en todos los departamentos, General López incluido, el traspaso en masa del porotismo, a 12 horas del cierre de listas, sorprendió al mundillo político venadense y, en particular, sacudió la interna peronista, porque Freyre y los suyos arrasaron con el armado rossista original, que impulsaba a Nicolás Miró para la Intendencia y una lista de concejales encabezada por Víctor Ubalton. Además, tamaña movida in extremis también obligó a los bielsistas a salir a las apuradas en busca de postulantes de reemplazo para el Sillón de Aufranc y las concejalías, aunque habrían fracasado en el intento.
Con un Bielsa inconmovible ante el reclamo venadense por un reparto más generoso, como ya lo había expresado el ex intendente Roberto Scott días atrás (demostrando una vez más que nunca se retiró de la política), los porotistas anunciaron que viajarían a la ciudad de Santa Fe dispuestos a hacer valer el peso de Venado, pero tanto era el malestar que, antes de embarcar, volvieron a comunicarse con la cúpula rossista y acordaron los trazos gruesos del acuerdo exprés, que anoche terminó de consumarse en la capital provincial. En consecuencia, alineados bajo la fórmula Agustín Rossi-Jorge Hoffmann, se ubican, como precandidato a senador provincial, el teodelinense Martín Labbé, que en diciembre completa su mandato en la Cámara baja, con la suplencia para Miró como premio consuelo; la diputación provincial expectante es para Darío Mascioli (¿en el quinto puesto?), como el porotismo le exigía al ex canciller; y José Freyre por la reelección, en tanto que la unidad no alcanzó a los concejales, ya que el porotismo no aceptó a Ubalton como escolta de Bustos, y el número dos era innegociable para los rossistas liderados por Julio Eggimann, aun cuando les otorgaban el número tres y les prometían la pronta renuncia de Orlanda para regresar a Acción Social. Así pues, la lista legislativa que responde al intendente cerró con Pedro Bustos, Norma Orlanda, Pedro Had y Sergio Pasquini, en tanto que la original terminó con Ubalton, Roberto Ledesma, Marcela Fumale y Marcelo García Lacombe.
Nuevamente se repitieron en esta ocasión, y por decenas, los vicios de las tradicionales madrugadas de cierre de listas, con cruentas disputas por los cargos, e incluso con cambio de candidato a gobernador a último momento, con en el caso del oficialismo venadense, que no mutó por cuestiones ideológicas ni de proyectos de gobierno, sino por una más tentadora oferta de espacios. Esta situación también es incómoda para Miró, Ubalton y compañía, que castigaron a Freyre por su posición vacilante respecto del Gobierno nacional, y ahora tienen que defenderlo como la principal espada rossista, por decisión del mismísimo Chivo, aun cuando se enfrentarán en las pulseada por las concejalías.
(Publicado el martes 22 de febrero de 2011 en diario El Informe)
Final abierto por la bronca porotista con Bielsa
Las declaraciones que el ex intendente Roberto Scott lanzó la semana pasada en medios locales, pero con intención de que se propaguen hacia toda la provincia, como efectivamente ocurrió, tenían el evidente propósito de presionar al precandidato a gobernador Rafael Bielsa para que fuera más generoso con los intereses del intendente José Luis Freyre en la región. En esa oportunidad, Scott cuestionó a los operadores bielsistas por desembarcar en General López “con todo armado”, intensificó el apriete colmando de elogios al precandidato opositor a Bielsa, Agustín Rossi, y reveló que días atrás, Alejandro Rossi (el hermano del Chivo), lo había sorprendido gratamente por su apertura para distribuir los cargos en el departamento (senaduría y diputaciones). Por si no bastara con esa descarga, hasta se dio el lujo de insinuar que su yerno podría cerrar a último momento con otro postulante (en obvia alusión a Rossi) a la Casa Gris, ante la desilusión que le habían causado los delegados del ex canciller. En rigor, el ex intendente pergeñó el ultimátum apenas se anoticiaron en San Martín y Marconi de que el único diputado provincial expectante (entre los ocho primeros) es el kirchnerista director de La Nueva Voz Regional de Teodelina, Jorge Abello, que también supo desempeñarse como jefe de la Osprera, la obra social de los trabajadores rurales de Uatre. Abello se ganó el lugar por su alineamiento con el referente del Movimiento Evita, el bielsista diputado nacional Gustavo Marconato, desplazando al postulante del porotismo venadense, Darío Mascioli, a un escalón alejado de los primeros lugares. En consecuencia, en la Municipalidad estallan de bronca y no faltan aquellos con ganas de arrancar pelo por pelo la encanecida barba de Bielsa. No obstante, ningún referente del sector está dispuesto a patear el tablero a estas alturas, aunque hoy la delegación porotista viajará a la ciudad de Santa Fe dispuesta a hacer valer el peso de Venado. “Nosotros somos, antes que nada, kirchneristas”, sentenció anoche un miembro del entorno de Freyre, deslizando que no habría que descartar la opción de un arreglo con Rossi, aunque también la Intendencia tiene excelentes vínculos con ministerios de la Casa Rosada que respaldan a Bielsa. Y eso podría pesar más que una diputación.
También los ánimos están alterados en las filas rossistas, con varios aspirantes a la senaduría (el teodelinense Martín Labbé iría por la reelección como diputado provincial), aunque el venadense Julio Eggimann asomaba con una pequeña luz de ventaja, en tanto que otro venadense, Fabián Daix, se sumó al grupo de pretendientes de ese mismo cargo representando al sector del precandidato a gobernador Omar Perotti.
Tino a tres puntas
Hasta estas horas, una de las grandes incógnitas para el peronismo local y regional es el destino del jefe del PJ santafesino y presidente del bloque opositor de la Cámara alta, Ricardo Spinozzi, que tras bajarse de la candidatura a la Casa Gris, estaría motorizando tres estrategias en forma simultánea para recalcular su ruta. Una de ellas es acordar con Bielsa, ya no como vice, porque ese cargo sería, como se anticipó el último viernes en esta columna, para el cien por ciento santafesino Oscar Cachi Martínez (le aseguran dos diputados entre los 10 primeros), sino como senador por General López, más aún sabiendo que dicho sector no tiene abrochada esa candidatura (aunque Scott sería el más renuente a incorporar al Tino al espacio). El Plan B es el cierre con Perotti, en este caso como vicegobernador, y con la ventaja de que podría colocar a Jorge Lagna como diputado provincial, garantizando la supervivencia de la estructura reutemista en el sur-sur. Pero este esquema no le convencería al rafaelino, que en su acuerdo con el obeidismo ya debió ceder varias diputaciones expectantes, y si hace lo propio con Lagna, teme quedarse con las manos vacías después de las primarias. Luego, la última opción que maneja el Tino es buscar la re-reelección como senador por una lista departamental, es decir, por fuera de los grandes alineamientos, jugándose solita mi alma a todo o nada. Es que, más allá de los aciertos y errores de Spinozzi, a esa situación extrema condenó el senador nacional Carlos Reutemann a todos los reutemistas, desde su entorno más cercano, hasta los más ignotos punteros. “Soy prescindente en las elecciones de Santa Fe”, dijo el Lole, rompiendo un largo hermetismo que también habían sufrido hasta sus lugartenientes más íntimos. “Hasta ahora hay dos candidatos muy identificados con el Gobierno (por Rossi y Bielsa), y veremos si aparece un espacio diferente al que marca la Casa Rosada”, evaluó, como si Spinozzi y Juan Carlos Mercier no hubieran dado sus vidas por él. Tamaño ninguneo del gran elector debilitó las acciones de ambos reutemistas en la hora clave de las negociaciones, aunque ninguno se resignó a su suerte, ni el Tino, con varias operaciones en marcha, ni Mercier, que habría tentado como senador al firmatense José Chipoloni, también tironeado desde el macrismo, que comienza a experimentar en la provincia el pacto que a nivel nacional rubricarían más adelante Mauricio Macri y Eduardo Duhalde. En este contexto, otro peronista que ya tiene un lugar en la lista de diputados del PRO es el líder regional de la Uatre, Luis Angelozzi. Y si bien el presidente comunal de Chabás, Osvaldo Salomón, lanzó su candidatura a la reelección, volvieron a invitarlo desde el macrismo para que sea el vice del Midachi Miguel del Sel, cargo para el que también se anotarían el duhaldista diputado provincial Norberto Nicotra y la jueza federal rosarina Laura Cosidoy.
Hoy a las 12 en punto de la noche, o más precisamente en la madrugada del martes, terminarán de presentarse las listas de candidatos, con los vicios de siempre, más allá de la boleta única o los padrones mixtos.
(Publicado el lunes 21 de febrero de 2011 en diario El Informe)
También los ánimos están alterados en las filas rossistas, con varios aspirantes a la senaduría (el teodelinense Martín Labbé iría por la reelección como diputado provincial), aunque el venadense Julio Eggimann asomaba con una pequeña luz de ventaja, en tanto que otro venadense, Fabián Daix, se sumó al grupo de pretendientes de ese mismo cargo representando al sector del precandidato a gobernador Omar Perotti.
Tino a tres puntas
Hasta estas horas, una de las grandes incógnitas para el peronismo local y regional es el destino del jefe del PJ santafesino y presidente del bloque opositor de la Cámara alta, Ricardo Spinozzi, que tras bajarse de la candidatura a la Casa Gris, estaría motorizando tres estrategias en forma simultánea para recalcular su ruta. Una de ellas es acordar con Bielsa, ya no como vice, porque ese cargo sería, como se anticipó el último viernes en esta columna, para el cien por ciento santafesino Oscar Cachi Martínez (le aseguran dos diputados entre los 10 primeros), sino como senador por General López, más aún sabiendo que dicho sector no tiene abrochada esa candidatura (aunque Scott sería el más renuente a incorporar al Tino al espacio). El Plan B es el cierre con Perotti, en este caso como vicegobernador, y con la ventaja de que podría colocar a Jorge Lagna como diputado provincial, garantizando la supervivencia de la estructura reutemista en el sur-sur. Pero este esquema no le convencería al rafaelino, que en su acuerdo con el obeidismo ya debió ceder varias diputaciones expectantes, y si hace lo propio con Lagna, teme quedarse con las manos vacías después de las primarias. Luego, la última opción que maneja el Tino es buscar la re-reelección como senador por una lista departamental, es decir, por fuera de los grandes alineamientos, jugándose solita mi alma a todo o nada. Es que, más allá de los aciertos y errores de Spinozzi, a esa situación extrema condenó el senador nacional Carlos Reutemann a todos los reutemistas, desde su entorno más cercano, hasta los más ignotos punteros. “Soy prescindente en las elecciones de Santa Fe”, dijo el Lole, rompiendo un largo hermetismo que también habían sufrido hasta sus lugartenientes más íntimos. “Hasta ahora hay dos candidatos muy identificados con el Gobierno (por Rossi y Bielsa), y veremos si aparece un espacio diferente al que marca la Casa Rosada”, evaluó, como si Spinozzi y Juan Carlos Mercier no hubieran dado sus vidas por él. Tamaño ninguneo del gran elector debilitó las acciones de ambos reutemistas en la hora clave de las negociaciones, aunque ninguno se resignó a su suerte, ni el Tino, con varias operaciones en marcha, ni Mercier, que habría tentado como senador al firmatense José Chipoloni, también tironeado desde el macrismo, que comienza a experimentar en la provincia el pacto que a nivel nacional rubricarían más adelante Mauricio Macri y Eduardo Duhalde. En este contexto, otro peronista que ya tiene un lugar en la lista de diputados del PRO es el líder regional de la Uatre, Luis Angelozzi. Y si bien el presidente comunal de Chabás, Osvaldo Salomón, lanzó su candidatura a la reelección, volvieron a invitarlo desde el macrismo para que sea el vice del Midachi Miguel del Sel, cargo para el que también se anotarían el duhaldista diputado provincial Norberto Nicotra y la jueza federal rosarina Laura Cosidoy.
Hoy a las 12 en punto de la noche, o más precisamente en la madrugada del martes, terminarán de presentarse las listas de candidatos, con los vicios de siempre, más allá de la boleta única o los padrones mixtos.
(Publicado el lunes 21 de febrero de 2011 en diario El Informe)
Spinozzi, Freyre y Scott, ¿juntos y con Bielsa?
El congreso del peronismo santafesino del último fin de semana demostró, una vez más, que la política grande se maneja por control remoto desde la Casa Rosada. Si Cristina Fernández ya había tomado la decisión de buscar la reelección, aunque oficialice la candidatura a último momento, en Santa Fe no había margen para una dispersión que pudiera perjudicar sus intereses electorales. En consecuencia, atrás quedaron las ínfulas ideologistas de Agustín Rossi, que rechazaba disputar una primaria con socios que poco después podrían saltar a los brazos del macrismo o el duhaldismo. Enseguida, encumbradas figuras de uno y otro sector, como el propio Chivo Rossi y el presidente del PJ provincial, Ricardo Spinozzi, se deshicieron en argumentos para justificar la aparente unidad bajo un mismo paragüas frentista denominado Santa Fe para Todos (se verá en las generales si el candidato conserva la sumatoria de todos los votos de las primarias), sorprendiendo que la excusa más recurrente fuera que en el Frente Progresista reinan más contradicciones que en el justicialismo. También dijo Spinozzi que el acuerdo era un clamor de las bases, pero lo cierto es que reutemistas y kirchneristas santafesinos son las dos caras de una misma moneda.
En principio, el nuevo escenario beneficia a Cristina, que consiguió evitar la inminente ruptura partidaria en una de las provincias más influyentes del país, privilegiando el operativo reelección, y también a los reutemistas, que se fueron quedando sin nafta, ante un peronismo federal anémico de candidatos atractivos, sobre todo con la temprana deserción de Carlos Reutemann, mientras que la cuestión del campo se esfumaba de la agenda y crecía la imagen presidencial en nuestra provincia. Huérfanos del Lole y con Jorge Obeid -el que mejor medía del sector- renunciando a la candidatura, el espacio compartido por reutemistas y obeidistas, de pronto, se favorecía más con el amontonamiento que con el rompimiento.
En cambio, el Frente para la Victoria, más allá del formal homenaje a Néstor Kirchner, no pudo arrancarle al reutemismo una declaración de compromiso con el Gobierno nacional -apenas un texto lavado-, hasta el punto tal que un par de días después el Lole aclaró que la unidad no significaba un respaldo a Cristina.
Sin dudas que los grupos más duros del kirchnerismo, identificados con el Chivo, están desencantados con las conclusiones del congreso, aun cuando cumplieron con la orden presidencial, pues la confesa estrategia era ir otra vez por afuera contra el reutemismo, con una lista K de paladar negro, en busca de usufructuar la mejor imagen del Gobierno. Pero, hoy, no sólo integran un mismo frente político con lo que denominan la derecha, sino que deben soportar que Cristina Fernández impulse también al ex canciller Rafael Bielsa, que va por la revancha tras la derrota en 2007 ante Hermes Binner, para competir en las eliminatorias de mayo.
Asimismo, las resoluciones del congreso del PJ golpearon fuerte en el ánimo del Frente Progresista, cuyos cerebros saben que ahora tienen menos margen de error -ya cometieron muchos-, si es que pretenden prolongar el control político provincial hasta 2015.
La misma actitud del reutemismo a nivel nacional se dio en Venado, cuando luego de la amenaza de imponerle un contrincante en la primaria al intendente José Freyre, el diputado provincial Jorge Lagna se erigió en el alfil más activo para limar asperezas y reunir a las figuras del viejo tronco scottista, desunidas por los vaivenes de la política.
Aunque en este turno el vianismo se declaró prescindente, el intendente Freyre -que propondría para el Concejo a Pedro Bustos y Norma Orlanda- tendrá como antagonista interno al rossismo, con Nicolás Miró en busca del Sillón de Aufranc y el histórico Víctor Ubalton como postulante a concejal. Levantando el perfil, el empresario inmobiliario cuestionó a Poroto por su escasa convicción kirchnerista y su predilección por Bielsa, de excelente relación con el ex intendente Roberto Scott, pero menos K que Rossi, según ellos. Sin embargo, la estrella de José Freyre podría brillar con máximo esplendor si prospera una de las tantas negociaciones en marcha -incluso en despachos de la Casa Rosada- para concentrar la oferta electoral del PJ en las primarias: por estas horas, una de las alternativas que se baraja es la fórmula Bielsa-Spinozzi, que si bien peca de sureña, sintetiza la armonía de kirchneristas y reutemistas, y significaría otra mala noticia para los rossistas (una variante como vice sería la diputada nacional Celia Arena, también reutemista). En este sentido, mientras Rossi se regodeaba días atrás vinculando al Lole con el PRO, Bielsa retrucó: “Es difícil pensar que Reutemann pueda tener afinidad ideológica con Macri”. Todo un gesto amistoso hacia el ex corredor. Además del apoyo de Freyre, varios caudillos comunales justicialistas del sur provincial, atravesados en 2008 por el conflicto del Gobierno con el campo, se están decidiendo en los últimos días a cerrar con Bielsa, que despierta menos resquemores que Rossi entre las poblaciones agrícolas, y por lo tanto es funcional a la necesidad de sumar de Cristina, mal que le pese al Chivo.
Si se constituyera el binomio entre el rosarino y el venadense, Freyre alinearía a la inmensa mayoría del peronismo local, y estaría en condiciones de consumar la contundente victoria electoral que anhela para saltar en 2015 a las ligas mayores. Más aún, el eje Spinozzi-Freyre podría incorporar a Scott como candidato a senador provincial, más allá de las dificultades que se les puedan presentar para vencer al postulante del Frente Progresista. Si los acuerdos progresan en estos días, ante la negativa de Scott, es posible que Lagna insista en ir por la senaduría que hoy ostenta el Tino, aunque Poroto insinuó que podría ceder dicha candidatura a sus socios departamentales, mientras el secretario de Desarrollo Productivo, Darío Mascioli, mantendría las chances intactas para la diputación provincial garantizada que designará el intendente venadense.
(Publicado el viernes 11 de febrero de 2011 en diario El Informe de Venado Tuerto)
En principio, el nuevo escenario beneficia a Cristina, que consiguió evitar la inminente ruptura partidaria en una de las provincias más influyentes del país, privilegiando el operativo reelección, y también a los reutemistas, que se fueron quedando sin nafta, ante un peronismo federal anémico de candidatos atractivos, sobre todo con la temprana deserción de Carlos Reutemann, mientras que la cuestión del campo se esfumaba de la agenda y crecía la imagen presidencial en nuestra provincia. Huérfanos del Lole y con Jorge Obeid -el que mejor medía del sector- renunciando a la candidatura, el espacio compartido por reutemistas y obeidistas, de pronto, se favorecía más con el amontonamiento que con el rompimiento.
En cambio, el Frente para la Victoria, más allá del formal homenaje a Néstor Kirchner, no pudo arrancarle al reutemismo una declaración de compromiso con el Gobierno nacional -apenas un texto lavado-, hasta el punto tal que un par de días después el Lole aclaró que la unidad no significaba un respaldo a Cristina.
Sin dudas que los grupos más duros del kirchnerismo, identificados con el Chivo, están desencantados con las conclusiones del congreso, aun cuando cumplieron con la orden presidencial, pues la confesa estrategia era ir otra vez por afuera contra el reutemismo, con una lista K de paladar negro, en busca de usufructuar la mejor imagen del Gobierno. Pero, hoy, no sólo integran un mismo frente político con lo que denominan la derecha, sino que deben soportar que Cristina Fernández impulse también al ex canciller Rafael Bielsa, que va por la revancha tras la derrota en 2007 ante Hermes Binner, para competir en las eliminatorias de mayo.
Asimismo, las resoluciones del congreso del PJ golpearon fuerte en el ánimo del Frente Progresista, cuyos cerebros saben que ahora tienen menos margen de error -ya cometieron muchos-, si es que pretenden prolongar el control político provincial hasta 2015.
La misma actitud del reutemismo a nivel nacional se dio en Venado, cuando luego de la amenaza de imponerle un contrincante en la primaria al intendente José Freyre, el diputado provincial Jorge Lagna se erigió en el alfil más activo para limar asperezas y reunir a las figuras del viejo tronco scottista, desunidas por los vaivenes de la política.
Aunque en este turno el vianismo se declaró prescindente, el intendente Freyre -que propondría para el Concejo a Pedro Bustos y Norma Orlanda- tendrá como antagonista interno al rossismo, con Nicolás Miró en busca del Sillón de Aufranc y el histórico Víctor Ubalton como postulante a concejal. Levantando el perfil, el empresario inmobiliario cuestionó a Poroto por su escasa convicción kirchnerista y su predilección por Bielsa, de excelente relación con el ex intendente Roberto Scott, pero menos K que Rossi, según ellos. Sin embargo, la estrella de José Freyre podría brillar con máximo esplendor si prospera una de las tantas negociaciones en marcha -incluso en despachos de la Casa Rosada- para concentrar la oferta electoral del PJ en las primarias: por estas horas, una de las alternativas que se baraja es la fórmula Bielsa-Spinozzi, que si bien peca de sureña, sintetiza la armonía de kirchneristas y reutemistas, y significaría otra mala noticia para los rossistas (una variante como vice sería la diputada nacional Celia Arena, también reutemista). En este sentido, mientras Rossi se regodeaba días atrás vinculando al Lole con el PRO, Bielsa retrucó: “Es difícil pensar que Reutemann pueda tener afinidad ideológica con Macri”. Todo un gesto amistoso hacia el ex corredor. Además del apoyo de Freyre, varios caudillos comunales justicialistas del sur provincial, atravesados en 2008 por el conflicto del Gobierno con el campo, se están decidiendo en los últimos días a cerrar con Bielsa, que despierta menos resquemores que Rossi entre las poblaciones agrícolas, y por lo tanto es funcional a la necesidad de sumar de Cristina, mal que le pese al Chivo.
Si se constituyera el binomio entre el rosarino y el venadense, Freyre alinearía a la inmensa mayoría del peronismo local, y estaría en condiciones de consumar la contundente victoria electoral que anhela para saltar en 2015 a las ligas mayores. Más aún, el eje Spinozzi-Freyre podría incorporar a Scott como candidato a senador provincial, más allá de las dificultades que se les puedan presentar para vencer al postulante del Frente Progresista. Si los acuerdos progresan en estos días, ante la negativa de Scott, es posible que Lagna insista en ir por la senaduría que hoy ostenta el Tino, aunque Poroto insinuó que podría ceder dicha candidatura a sus socios departamentales, mientras el secretario de Desarrollo Productivo, Darío Mascioli, mantendría las chances intactas para la diputación provincial garantizada que designará el intendente venadense.
(Publicado el viernes 11 de febrero de 2011 en diario El Informe de Venado Tuerto)
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